CITA

"La misma esperanza deja de ser felicidad cuando va acompañada de la impaciencia" Jhon Ruskin

jueves, 1 de marzo de 2012

Nuestra historia

No hay un momento concreto en el que decidiéramos ser padres, nunca dijimos "a partir de hoy lo vamos a intentar", pero es una cosa que tampoco nos hizo falta hablarlo porque teníamos muy claro los dos que queríamos formar una familia. Pero el tiempo pasa y te das cuenta (a pesar de no querer reconocerlo) que "algo falla", hay algo que no va bien. Utilizas todos los métodos habidos y por haber, te encomiendas a los días en los que se supone que es más factible porque lo has leído en algún sitio o porque te lo ha dicho "fulano" o "mengano", pero una vez más sin resultado satisfactorio, más bien al contrario, te vas cerciorando de que hay algo que no funciona bien. 
Mientras tanto, amigos y conocidos te van dando las grandísimas noticias de que están esperando un hij@, de lo cual por supuesto te alegras muchísimo pero a la vez te preguntas: ¿Y por qué nosotros no? 
Entonces es cuando llega el primer paso que jamás te hubiera gustado dar, ir al médico a que te digan las posibles causas de esa posible infertilidad. Al ir a ese primer médico, lo que nunca te imaginas es que esa va a ser la primera de muchísimas visitas que nos quedan por delante, pero todo ello buscando un único objetivo, el de "ser padres". Teniendo eso en mente y con las baterías a tope de optimismo, nos hacemos todos los estudios necesarios, unos más desagradables que otros pero por los que se pasa porque tienes ese objetivo claro en la mente. Llegan los resultados y te empiezan a confirmar lo que nunca querías haber oído pero a la vez te ofrecen los diferentes tratamientos posibles de reproducción asistida. Te encuentras con médicos que parece que perdieron el tacto y las formas en su niñez, lo cual te enfurece y te va minando poco a poco, hay otros que son todo lo contrario y te insuflan una corriente de positivismo, lo cual se agradece y mucho.
Tras muchos estudios en los diferentes hospitales, varios viajes a Cruces, al IVI de Bilbao, etc. valoras todas las opciones y decides hacer el tratamiento que te han recomendado. Ahí llega el primer palo más duro, ha resultado negativo, es el momento de aparentar delante de todo el mundo que no pasa nada y que estás a tope de moral pero en la soledad, es inevitable volver a preguntarte ¿Por qué nos tiene que pasar esto a nosotros? y acompañarlo con lágrimas de rabia, impotencia,...

Nos damos un tiempo para recuperarnos físicamente, económicamente (no son precisamente baratos) y sobre todo anímicamente  para afrontar un segundo tratamiento en el que depositas por supuesto todas tus esperanzas pero con cierto recelo y sin querer hacerte excesivas ilusiones de que vaya a resultar satisfactorio.
Llega el segundo golpe, quizás más duro que el anterior, cuando te dan la noticia de que es otro negativo y una vez más te derrumbas anímicamente y se repite el mismo proceso, te sientes hundido pero a la vez no quieres que nadie te vea así y apenas hay gente con la que puedes o quieres hablar del tema porque tampoco es una cosa que hayas hecho pública, más que a la gente más cercana. Más lagrimas, más impotencia, más rabia, momentos muy difíciles que no se los deseo ni a mi peor enemigo.
En un momento entre tanta desilusión y tanta mala suerte, tenemos la grandísima noticia del nacimiento de nuestra sobrina Anne y al preguntarle a mi hermano a ver qué tal había ido el parto, éste me contesta que es algo que todo el mundo debería vivir en la vida... Estas palabras se me quedaron clavadas y cada vez que nos daban un maldito negativo, me venían a la mente y veía que no iba a ser posible vivir esa maravillosa experiencia que él me contaba, lo cual me hacía más daño aún.
Entonces es cuando entra en juego la idea de la adopción, la cual ya teníamos muy presente desde hacía mucho tiempo y que aunque hubiera sido un positivo, yo creo que hubiéramos llevado adelante, pero ya decidimos olvidarnos totalmente de médicos, de tratamientos, de hospitales y darle forma a esta idea. Tampoco es fácil pasar todos los trámites y todas las barreras que las instituciones te ponen y te sientes analizado pero de otra forma. Realizas cursos, te analiza un psicólogo, una trabajadora social, haces mil test, necesitas certificar tus ingresos, tus propiedades, tu estado de salud, y un largo etcétera. Te sientes analizado, estudiado, controlado,... 
A pesar de todo esto, hoy es el día que me arrepiento mucho de no haber dado antes este paso porque quizás hoy ya podríamos estar disfrutando de nuestr@ hij@ y no hubiéramos pasado el calvario ante tanta mala noticia de los dichosos tratamientos. Si pudiera dar marcha atrás en el tiempo, tengo clarísimo que no realizaría ni un solo tratamiento y que depositaría todas mis fuerzas en la adopción, pero de todo se aprende. Lo importante de todos modos es que cada día que pasa estamos un día más cerca de nuestr@ hij@ y que sabemos que Etiopia nos espera.

17 comentarios:

  1. Yo también pienso que teníamos que haber dado el paso antes,pero creo que si dimos el paso en ese momento es porque los que nenes que vengan son los que estaban destinados para nosotros.

    Besitos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. De todo se aprende y hay que aprender además todo lo posible y creo que así lo hemos hecho. Gracias por escribir, un abrazo

      Eliminar
  2. Como me suena esa historia, pero todo llega, algun dia podremos gritar a todos que vamos a ser papis y nos olvidaremos de esos momentos tan horribles que hemos pasado.
    Un besiño y a soñar con nuestros pekes

    ResponderEliminar
  3. No puedo entenderos mejor...
    Pero esto estaba pensado para nosotros!!! Por eso, como bien dices... Etiopía nos espera!!!
    Estamos juntos en esto, chicos!!!
    Besazo!!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Esto es solo para elegidos y nos ha tocado jejejeje
      Muchas gracias guapa

      Eliminar
  4. Me he identificado completamente, como os entiendo... sólo los que pasamos por ello sabemos lo que es. Pero en esta vida las cosas son así y hay que tirar para delante al fin al cabo arrepentirse de lo que no hiciste o de lo que debiste hacer ahor no sirve de nada. Borrón y cuenta nueva.
    Un saludo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No queda más remedio, así que ya estamos totalmente centrados en lo que nos espera... Etiopia.
      Un saludo y gracias por escribir.

      Eliminar
  5. Chicos, no vale la pena arrepentirse!! Lo que se ha hecho bien esta....si no no hubieseis llegado hasta aquí, no??

    Nosotros vamos a comenzar ahora a buscar el bio y si tenemos algo claro es que en caso de que haya problemas tratamientos cero...

    Un besito bien grande y con la vista puesta en Etiopía!
    Ester

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ester lo pasado, pasado está, efectivamente, así que ahora estamos al 110% centrados en Etiopia. Saludos guapa y mucha suerte, me parece una decisión muy acertada la de "tratamientos cero"

      Eliminar
  6. Pues como las compis, nada de arrepentimientos, eso quizas os ha hecho mas fuertes!! Y me alegra veros así de animados y disfrutando de esta espera que aunque es diferente es maravillosa.

    Muchos besitos!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Dicen los budistas que el dolor, las adversidades, los retos, los obstáculos pueden ser las mejores oportunidades para aprender, crecer y madurar emocionalmente.

      "Lo que no te mata, te hace más fuerte"

      Un besote Sandra y gracias por escribir.

      Eliminar
  7. Hola!!!
    Que deciros... Solamente que nosotros hemos pasado exactamente por lo mismo... Si no miro el título y veo que no es nuestro blog, bien podía pensar que lo había escrito yo...
    Los mismos pasos, los mismos sentimientos, las mismas sensaciones. Hasta los más cercanos no se dan cuenta de lo que pasamos y el daño que nos pueden hacer con ciertas noticias o comentarios... Solamente y después de haber pasado todo "eso" que sabemos, nos preguntamos ¿por qué no lo hemos hecho antes? ¿por qué no hemos adoptado antes?.
    Cuando empezamos a informarnos sobre las adopciones internacionales, nos encontramos con una persona que nos dijo: "la adopción es un privilegio al que solamente acceden las personas hechas de una pasta especial"
    Después de un año de haber dejado atrás la opción de ser padres biológicos, ya no añoro (como mujer) ni el embarazo, ni el parto (incluso me agobio a veces pensando: ¿y si me quedo embarazada ahora?)... Solamente vivo pensando en el momento de encontrarnos con nuestr@ niñ@, y que será un momento que muy pocos tenemos el privilegio de sentir... de vivir.
    Seguro que a vosotros os pasa lo mismo ¿verdad?.
    Un Beso.
    Sofía.
    http://colorennuestravida.blogspot.com/

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Nos pasa exactamente lo mismo que a vosotros.
      He agregado tu blog en mi lista, espero que no te moleste. Si hubiera alguna pega, me lo comentas y lo borro.
      Un saludo Sofia.
      Francis y Cris

      Eliminar
    2. Encantada de compartir experiencias, camino y vida!!!!
      Besos para los dos!!

      Eliminar
  8. En fin..no hay mucho que decir que no hayan dicho ya nuestras compañeras.. Nada más y nada menos que SEIS tratamientos a mis espaldas.. el recuerdo de una profunda tristeza cada vez que tus ilusiones se desvanecen por completo.. Jamás pensé que esos recuerdos se borrarían de mi mente, pero entonces pasa el tiempo, los recuerdos primeros se vandesvaneciendo y empiezan a cobrar fuerza otros recuerdos posteriores: un CI positivo, una firma con la Ecai, un expediente en tierras etíopes...
    Chicos, lo mejor está por venir! Somos unos privilegiados, vamos a adoptar!!!!!
    Un besazo!

    ResponderEliminar
  9. Este es un camino que compartimos. Llegar hasta aquí no ha sido fácil. La mayoría hemos pasado por médicos con sus correspondientes pruebas, desesperanza por ver pasar el tiempo sin conseguir nuestro objetivo, posteriormente el CI con sus frecuentes evaluaciones pero todo este proceso, nos ha hecho fuertes para sobrellevar una espera que tendrá un final feliz. Muchos ánimos a tod@s!
    Un abrazo!!

    ResponderEliminar